jueves, 28 de agosto de 2014

Lo tuvo en su mano y lo dejó escapar

Le tocaba afrontar al Nápoles un partido trascendental en el devenir de su temporada. El reto era importante, el pase a la Liga de Campeones constituía uno de los principales objetivos del equipo y el resultado desfavorable de la ida en San Paolo la hacía aún más complicado. Esta desventaja de inicio provocó que en varias fases del encuentro el equipo italiano adoptase una posición dominante llevando el peso del partido, situación ésta bastante incómoda para los napolitanos que se sienten más a gusto con espacios.

En la primera mitad, el equipo de Rafa Benítez fue incapaz de superar la presión alta del Athletic combinando con la pareja mediocentros Jorginho-Gargano, quienes apenas intervinieron en esta faceta del juego. El juego iba por fuera y en alguna ocasión sí que encontraron la manera de romper dicha presión por medio de la combinación directa con los extremos. Bien Callejón o bien Mertens posibilitaron que los partenopeos pudiesen salir con el balón jugado alternando apoyos en corto con desmarques a la espalda de los laterales. Las bandas fueron las zonas de actuación del equipo italiano y por donde mayor sensación de peligro causó aunque, eso sí, sin llegar a crear grandes ocasiones de gol.

Estas dificultades a la hora de salir con el balón jugado obligaron a abusar del balón en largo hacia Higuaín, en clara desventaja, generando muchas perdidas de balón y permitiendo que el Athletic estuviese cómodo y apenas sufriese en defensa. El partido se jugó la mayor parte del tiempo en campo napolitano para alegría de Ernesto Valverde. Esta fue la tónica del primer tiempo, la cual hacía presagiar que algo tendría que cambiar para que el Nápoles pudiese llevarse la eliminatoria.

Empezó la segunda parte y al minuto de juego todo cambio. Un balón a la espalda de Balenziaga mal despejado por éste, permitió a Hamsik recoger la segunda jugada en la frontal del área y soltar un disparo preciso a la base del palo que se cólo en la portería de Iraizoz. De este modo, el partido cambiaba radicalmente y se le ponía todo a favor al Napolés, un equipo que prefiere que el peso del partido sea manjeado por el rival, replegar con las líneas bien juntas, apretar en su campo y ante la pérdida del rival matarlo a la contra por medio de sus rápidos atacantes, fundamentalmente a través de los extremos.

Pero cuando todo estaba en su mano y se había puesto el partido como ellos querían, apareció la fragilidad defensiva y una concatenación de errores dio pie a que el Athletic remontase el partido y apease al conjunto napolitano de la Liga de Campeones. Este fracaso puede repercutir de un modo notorio en la plantilla y provocar que algunos de los fichajes que estaban cerca de convertirse en realidad se trunquen ante la imposibilidad de jugar la competición continental más importante. Lo tuvieron en su mano y  lo dejaron escapar.

miércoles, 27 de agosto de 2014

El Oporto entre los mejores

Un renovado Oporto ha certificado su clasificación para la fase de grupos de la Champions League tras vencer ayer al Lille francés por 2-0 en Do Dragao. Lopetegui ha cambiado radicalmente la ideología que venía siendo habitual en el equipo portugués en los últimos tiempos, cambiando la presión más transición de los últimos años por el control a través del posicionamiento y la posesión. El proyecto aún está verde pero las lineas maestras ya son fácilmente distinguibles. El conjunto de Lopetegui aspira a dominar los partidos a través de la posesión y para ello han llegado varios jugadores -muy jóvenes la mayoría- muy del gusto del entrenador español.

Alineaciones del partido
Alineaciones del partido
Durante esta eliminatoria el equipo no ha sido dominante, ni siquiera ha sido capaz de empujar en muchos momentos al Lille hacia su campo, pero ha ganado con justicia amén de un compromiso defensivo tremendo de todos sus jugadores y de la mayor calidad de sus futbolistas. Ayer el conjunto portugués salió a dominar con un 4-1-4-1 y no rehuyó de intentar la salida de balón por abajo en ningún momento. Sus centrales Martins Indi y Maicon ofrecen una salida solvente, tienen calidad y se atreven con conducciones para dividir y pasar, punto clave hoy en día para agilizar la salida desde atrás. Ese atrevimiento junto con la lentitud con balón de Casemiro provocaron ayer pérdidas preocupantes que minaron ligeramente la confianza del equipo y alentaron al contrario que se veía capaz. Deberán minimizar esas pérdidas porque a nivel Champions cuestan partidos. Para ayudar a la salida la linea de cuatro medios van y vienen con gran movilidad, generando espacios, intercambiando posiciones y abriendo lineas de pases constantemente. Faltó coordinación pero hubo ratos de salida de pelota de gran calidad con Herrera y el joven Rubén Neves moviéndose muy bien.
La lentitud con balón de Casemiro provocó pérdidas que minaron ligeramente la confianza del equipo y alentaron al contrario que se veía capaz
Si Maicon ejercía de pilar que sostenía el sistema defensivo y dotaba de claridad al primer pase del conjunto portugués, Brahimi fue el elemento diferencial. Dentro de ese caos de movilidad que propuso Lopetegui sobresalió sobremanera, con total libertad recibía en ventaja y con su electricidad generaba desequilibrios que los defensas del Lille eran incapaces de corregir. Ante tal amenaza recurrieron a las faltas, una y otra vez paraban al ex del Granada con faltas. Y así llegó el primer tanto. Una falta en la frontal que él mismo convierte con un magistral golpeo de interior. El jugador argelino siguió creciendo con el paso de los minutos, aparecía por fuera y por dentro indistintamente y -casi- siempre generó algo positivo en sus intervenciones. Culminó su genial actuación con una asistencia a Jackson para el 2-0. El Lille cometió una pérdida en salida de pelota con los laterales abiertos, Brahimi recibió trazando una diagonal fuera-dentro, dividió a los centrales y metió un pase que Jackson no perdonó. 2-0 y eliminatoria sentenciada al ritmo del vistoso extremo argelino.
Brahimi con total libertad recibía en ventaja y con su electricidad generaba desequilibrios que los defensas del Lille eran incapaces de corregir.
Además de su contribución ofensiva hay que resaltar su compromiso defensivo. Compromiso trasladable al resto de jugadores ofensivos que compensaron los múltiples desajustes tácticos -lógicos a estas alturas de proyecto- con un derroche físico y un sacrificio tremendo. Y es que hay que destacar que esa enorme movilidad ofensiva derivó en un dibujo defensivo confuso en muchos momentos, provocando desequilibrios en la presión que, eso sí, eran tapados una y otra vez a través del repliegue y el sacrificio defensivo. Buena puesta en marcha de un proyecto aún tierno pero que promete ser muy interesante.

sábado, 23 de agosto de 2014

El Atlético no se ha ido

Ganó el Atlético de Madrid la Supercopa de España en una final -a doble partido- tremendamente disputada. El título, de esos que llaman menor, sirve para corroborar que el Atlético no se ha ido, que tendremos que volver a repetir el esfuerzo del año pasado y considerarlo favorito a todo hasta que se demuestre lo contrario. Y digo repetir esfuerzo porque el año pasado nadie se lo creía hasta Marzo, parecía imposible. Este año perdieron gente de primerísimo nivel, aun más imposible. Pero no hay hazaña inalcanzable para la férrea voluntad que el Cholo ha imprimido a este grupo de magníficos guerreros. Son la definición perfecta de equipo.
 No hay hazaña inalcanzable para la férrea voluntad que el Cholo ha imprimido a este grupo de magníficos guerreros.
Ayer entró Griezmann por Saul, y Raul García pasó a banda en el 4-4-2. La posición de Griezmann como segundo delantero fue un incordio para la pareja de centrales blancos que ayer firmaron uno de los partidos mas erráticos que les recuerdo. Partía en paralelo a Mandzukic, sí éste disputaba corría la peinada, si los medios tenían tiempo y espacio bajaba entre lineas a recibir a espaldas de un centro del campo blanco que se vio superado -principalmente en el segundo tiempo-. El partido de Griezmann fue notable, en sintonía con el resto del equipo en el trabajo táctico y defensivo, y aportando esa chispa que caracteriza su juego al ataque del Atlético. Prueba de su implicación en el juego de su equipo es el gol del conjunto colchonero. El Madrid salió relajado al partido, el Atlético en tromba. Un pelotazo del portero, Varane falla en el cuerpo a cuerpo con Mandzukic -le cuesta mucho contra delanteros corpulentos-, Griezmann la peina y Mandzukic define bien abajo. Destacar el fallo impropio de Ramos en el gol.
Un central que no tiene quien le haga cobertura  no puede ir a disputar un balón a cabeza, tiene que coger distancia para poder llegar a la posible prolongación y si el contrario la baja, controlando con la cabeza, poder encimarle.
El gol noqueó al Madrid que tardó en reponerse. De nuevo el 4-4-2 estrecho planteado por el Cholo empujaba al Madrid a jugar por fuera. Kroos bajaba continuamente a recibir a terreno de Xabi favoreciendo la presión hacia delante del Atlético. James y Bale volvían a estar, como en el partido de ida, clavados en banda para dar amplitud. Amplitud totalmente inocua ante el atasco que sufría el Madrid por dentro. ¿La solución? De nuevo la del partido de ida, cambios de orientación jugada tras jugada. El Atlético basculaba sin fisuras y apretaba el control del receptor del cambio, y robaba. Robó mucho en ese inicio.
Todo cambió con James. Ayer el colombiano fue uno de los jugadores mas destacados del equipo blanco a raíz del cambio táctico planteado por Ancelotti. Viendo que los interiores blancos eran incapaces de ofrecerse por delante de la pelota batiendo lineas, ordenó que James y Bale abandonasen la banda en desmarques fuera-dentro a la espalda de la linea de cuatro medios atléticos. A partir de esos movimientos creció el Madrid, principalmente a través de un James que jugando de '10' brilló con luz propia y se erigió como una fuente de peligro constante durante el resto del primer periodo. El Madrid filtraba el balón entre lineas obligando al Atlético a recular para recuperar posiciones por detrás de la pelota. En este escenario se hizo grande Carvajal que perforó la banda derecha, ahora libre, una y otra vez, contando siempre con el inestimable apoyo de Luka Modric. Xabi -filtrando pases- y Benzema -haciendo apoyos y descargando de primeras- crecieron para acabar de desbordar a un Atlético que recibió el descanso como una bendición.
James fue el mejor jugador blanco durante el primer tiempo jugando de "10".
En el segundo tiempo entró Cristiano por Kroos. El técnico italiano quiso aprovechar la inercia del primer tiempo para bajar a James a la posición de Kroos y tener una posesión mas incisiva. Quizás no tuvo en cuenta la voluntad estoica de un rival que en cuanto atisbó la debilidad que provocaba James en la posición de interior se lanzó a por ella como una manada de lobos. El Atlético robaba y mantenía la pelota ante un centro del campo blanco desarbolado incapaz de recuperar. James desubicado y sin físico para cubrir sus fallos tácticos se convirtió en un boquete que aprovecharon Tiago y Gabi para recoger -casi- todas las segundas jugadas. Los cambios de Ancelotti no solucionaron el problema, el Atlético ya había crecido y se lo creía, buscaba el segundo gol y se acercaba a él por momentos. El partido acabó convertido en una especie de corre-calles en el que el Atlético se sentía dominador posicional en todo momento.
Con este título el Atlético presenta sus credenciales ante toda Europa para la temporada 14/15. Queda por ver si, como dice su entrenador, pueden competir a 38 jornadas con el Madrid y el Barça sin la autosuficiencia de Diego Costa. Lo que es seguro es que todos los entrenadores de los equipos Champions miran a la rivera del Manzanares con un temor bien fundado. El Atlético no se ha ido.

miércoles, 20 de agosto de 2014

Viejos conocidos

Dos viejos conocidos se enfrentaron ayer en el Bernabeu en el partido de ida de la Supercopa de España. Si, dos viejos conocidos, a pesar de todas las caras nuevas. Y es que el Atlético despejó ayer cualquier atisbo de duda acerca de qué clase de equipo sería esta temporada. El Atlético es lo mismo de la temporada pasada con algún jugador distinto y su respectivo ajuste táctico. El espíritu ha calado hondo en esa camiseta, la filosofía está clara.

El Cholo salió ayer al Santiago Bernabeu formando con su ya clásico 4-4-2 muy estrecho, sin extremos. Por una banda Koke, por la otra Saúl Ñiguez, y arriba Mandzukic y Raúl García, un equipo sin velocidad que difícilmente tendría la oportunidad de triunfar a la contra si había demasiados metros por delante. El entrenador argentino a sabiendas que la final es de 180' planteó un partido cerrado, a la espera de poder aprovechar un error del rival o una jugada a balón parado. Alternó algún momento de presión alta, intentando provocar algún error del Real Madrid en salida (robo de Saúl a Ramos), con repliegues en campo propio -el físico a estas alturas aun no permite alardes-.
"El entrenador argentino a sabiendas que la final es de 180' planteó un partido cerrado"
El Real Madrid no encontró respuesta ofensiva al planteamiento del Atlético. Modric y Kroos muy abiertos intentaban escapar de la presión atlética pero no consiguieron generar tampoco apenas superioridades en banda. Además, al estar tan abiertos los interiores, Benzema quedaba como única referencia por dentro, rodeado de camisetas rojiblancas. Bale y Cristiano clavados en banda, seguramente por orden de Ancelotti para dar amplitud acabaron por colapsar el juego blanco que era incapaz de acercarse a la portería de Moya. 

Sin ningún apoyo por dentro Madric se ve obligado a recurrir al cambio de banda.

En el segundo tiempo entró James por Cristiano -con molestias- y Ancelotti metió a Bale mas al medio. El Real Madrid mejoró sustancialmente. James y Bale comenzaron a recibir por dentro a espaldas de la linea de cuatro medios del Atlético para a continuación descargar rápido a banda, donde ahora si, los laterales tenían más espacio. Ese movimiento permitía a los interiores subir unos metros para ofrecer un apoyo seguro por detrás. Entró Di María y revolucionó el partido, es un jugador completamente distinto a todo lo que tiene el Real Madrid. Encaró una y otra vez provocando inquietud en las lineas atléticas. Marcó el Madrid en una buena jugada. Y empató el Atlético aprovechando su carta, el balón parado. 
"Di María y revolucionó el partido, es un jugador completamente distinto"
La final se decidirá en el Calderón. El Atlético a renovado sus credenciales, sin la autosuficiencia de Diego Costa sigue siendo el mismo equipo. Tremenda solidez defensiva, dominio total del área propia y gran peligro a balón parado, a la espera de ver la adaptación de Griezmann y posibles refuerzos y su aportación al contraataque. El Real Madrid sin nadie eléctrico que rompiese lineas en conducción o hiciese algo distinto sufrió para desmantelar el entramado defensivo atlético, moviendo el balón demasiado lento no pudo sorprender. 



martes, 19 de agosto de 2014

Victoria cómoda en su estreno

Había expectación para ver el debut del equipo de José Mourinho en la Premier League, más aún cuando los demás favoritos para llevarse el título no tuvieron una gran actuación en sus estrenos. Todo lo contrario que el Chelsea, que además de ganar dio una muy buena imagen. Bien es cierto que su rival, el recién ascendido Burnley, es a priori uno de los equipos más flojos de la liga y un claro candidato al descenso. Sin embargo, hubo detalles positivos en la dinámica del equipo londinense que merecen ser destacados.

La vuelta de Cesc Fábregas a la Premier League no podría haber comenzado mejor. Fue el encargado de darle sentido a la salida de balón blue, se acercó continuamente a la posición de Matic para ofrecerse. Pero no se limitó a funciones de salida de pelota, toda vez que el balón iba avanzando hacia posiciones delanteras, el catalán se descolgaba y dejaba al serbio como único mediocentro. De este modo, Mourinho permitió mostrar al jugador español una de sus mejores virtudes, su peligro cerca del área rival. Fábregas se encuentra muy cómodo con este sistema, siendo el referente en la organización del juego y teniendo esa libertad para moverse cerca del área rival y sacar a relucir su privilegiado último pase. Bien quedó demostrado durante el partido, ya que los tres goles del Chelsea nacieron de sus botas (para enmarcar la soberbia asistencia del segundo tanto blue).

Otro de los aspectos a destacar fue la gran cantidad de variantes ofensivas que ofreció la línea de tres mediaspuntas formada por Schürrle, Óscar y Hazard. Los tres hicieron gala de una gran movilidad por delante de la pelota, intercambiando sus posiciones de manera constante, lo que unido a su gran talento dotó al ataque del equipo londinense de una enorme variedad de recursos. El alemán ofreció buenas alternativas con sus desmarques al espacio, a la espalda de los defensas, y permitió a su equipo alternar el juego. El brasileño oxigenó la circulación de balón cuando Cesc y Matic estaban bien presionados, lo cual dio aire al equipo para salir desde atrás. Por su parte, el belga dejó como en él es habitual un sinfín de detalles, sobre todo sus peculiares conducciones, eléctricas, con el balón pegado y dejando rivales atrás a su paso. Es el jugador diferencial.

Por otro lado, la llegada de Diego Costa genera unos recursos ofensivos que José Mourinho no poseía el año pasado en su retorno al Chelsea. Son por todos bien conocidas las características del delantero brasileño, permite que en aquellas ocasiones en las que el equipo se vea apretado en salida de balón, busque en largo a Costa para que porfíe con los defensas rivales y genere juego gracias a sus cualidades. Así se pudo comprobar en el debut de ayer, tanto los centrales como Courtois buscaron al delantero en numerosas ocasiones. Bien es cierto que ayer el resultado no fue el mejor ya que Diego no estuvo muy afortunado en estas batallas. No hay duda que irá mejorando y durante la temporada será un recurso muy valioso para el equipo.

En último lugar hay que destacar el gran poder que demostró el Chelsea en las jugadas a balón parado, parte del juego que puede decidir muchos puntos valiosos a lo largo de la temporada. Tener en un mismo equipo, jugadores de la talla de Terry, Cahill, Ivanovic, Matic y Diego Costa hacen temer al equipo rival en cada ocasión en la que lanzadores como Cesc o Hazard decidan colgar el balón al área.

Por todo ello, y aunque el rival no fuese uno de los más poderosos de la liga, el Chelsea jugo un partido muy sobrio (sobre todo la primera mitad) y presentó sus credenciales para disputar la Premier League este año. Es uno de los proyectos más sólidos desde ya.

domingo, 17 de agosto de 2014

Fernando en el City

Fernando llegó traspasado, sin demasiado ruido, este verano  por 15 millones, procedente del Oporto. Un fichaje alejado de lo que nos tiene acostumbrados el equipo blue. Sin glamour, ni demasiada fama, fichaban a un trabajador incansable. Un jugador que no llena portadas pero te acerca a los títulos, un jugador de equipo. Hoy debutó Fernando en la Premier League, lo hizo de titular, jugando el partido completo y salvando in-extremis el posible gol del empate del Newcastle.

Mediocentro de los que cada vez quedan menos. Un jugador que se sitúa por delante de los centrales, rara vez pierde la posición ni la pelota, tampoco genera ventajas con sus pases. Está siempre bien colocado -por detrás de la pelota- para ofrecer un apoyo seguro o apretar tras pérdida. Cuando roba juega fácil, el pase seguro, y permite al equipo evitar la primera presión. Su misión es dar consistencia al equipo, tapar huecos en defensa y jugar en ataque rápido y sencillo, son otros los que deben darle virtuosismo a la circulación.

Hoy, en su primer partido en liga formó junto a Yaya Toure en un 4-4-1-1 en defensa que se difuminaba hasta el infinito en ataque. Cuando el Newcastle salía desde atrás el City replegaba en dos lineas de cuatro con Jovetic en un paso intermedio y Dzeko entre centrales. Ahí Fernando y Yaya formaron un doble pivote de presión bastante baja cuya misión era echar hacia las bandas -donde solían morir- los ataques del Newcastle. 

La importancia de Fernando crecía paradojicamente cuando el City tenía la pelota. El dibujo se deformaba totalmente debido a la total libertad de movimientos de todos lo jugadores ofensivos del City, incluido Yaya Toure en muchas fases del encuentro. A los movimientos de los Silva, Jovetic, Nasri, Yaya y Dzeko, se les unía el lateral de la banda sobre la que se estaba jugando, e incluso en alguna jugada aislada, también el movimiento en profundidad del lateral lejano. Fernando se tornó en un elemento capital para dar estabilidad al sistema ofensivo. Formó durante todo el encuentro un núcleo duro con Kompany y Demichelis, encargado de ralentizar cualquier contra para permitir el repliegue del resto del equipo. Tarea ardua ante las salidas en velocidad de los Riviere, Cabella y Sissoko. Y alcanzó su cenit de importancia cuando apareció entre centrales y se lanzó al suelo evitando un mas que posible gol de Ayoze.

Significó el contrapunto, la nota disonante que mantuvo a su equipo estable, al menos en parte, durante todo el partido. Todos los jugadores por delante del balón en el ataque del City disponen de una calidad incalculable, y todos pecan a su vez de un mismo movimiento, la quieren al pie y se mueven en apoyo continuamente. El desmarque en apoyo, a veces relajado, es propenso a pérdidas que suponen contras. Son pérdidas de cara a tu portería que permiten salir al rival mirando hacia delante con campo abierto. Y para paliar ese déficit ha llegado Fernando.

Consciente de que ese "pecado" es innato en sus jugadores mas determinantes, el Machester City peinó el mercado en busca de un obrero que fuese su contrapunto en el campo. Y lo ha encontrado en Fernando. Un fichaje que seguro no habrá ilusionado a ningún aficionado citizen, pero que será una pieza clave en el desenlace de la temporada de su equipo.

sábado, 16 de agosto de 2014

Desgranando al United

Louis Van Gaal ha debutado con derrota en la Premier League. Lo ha hecho con un ManUtd plagado de bajas ante un Swansea bien plantado y con las ideas muy claras. Como todo el mundo esperaba el técnico holandés salió formando con el 5-2-1-2 que tan buen resultado le dio en el mundial con la selección holandesa. Ante la plaga de bajas, hizo debutar a Lingard (21 años) y Blackett (20). También formaron en el once, Chicharito y Ashley Young de carrilero izquierdo.

Formaciones de inicio de ambos equipos.
El sistema del técnico holandés potencia la salida de centrales cuando se enfrenta a un equipo bien replegado. Sin embargo, a día de hoy, no cuenta en la plantilla con jugadores en esa demarcación que tengan la capacidad de canalizar la salida de balón de su equipo de forma consistente. Jugar con tres centrales permite que siempre haya un central liberado -incluso jugando contra dos delanteros-, ese central libre tiene el camino abierto para subir conduciendo y provocar que un medio tenga que salir a apretarle destapando lineas de pase ya sea hacia banda o hacia el centro del campo. Los centrales del ManUtd no lo hicieron en ningún momento, ya sea por falta de calidad o confianza, y el equipo era incapaz de batir lineas. Los pases entre centrales no incomodaban en absoluto al Swansea que se limitaba a bascular lentamente tapando las posibles recepciones de Ander y Mata, ambos muy móviles (y poco más). Los centrocampistas del Manchester notaban el atasco y ante la imposibilidad de recibir batiendo lineas bajaban a dar el apoyo por delante de la primera linea de presión del rival donde no generaban soluciones al atasco general.

Ambos centrocampistas por delante de la primera linea de presión del Swansea.
Ante la imposibilidad de generar ventajas a través de la asociación en corto, los centrales optaron por abusar de las diagonales a los carrileros o balones en profundidad al desmarque dentro-fuera de los delanteros. El Swansea bien plantado defendió la mayoría de esas jugadas sin apenas problemas. Además los carrileros del Machester nunca se clavaron a una altura que permitiese circular el balón a través de ellos y se convirtieron en meros receptores de diagonales o segundas jugadas. La producción ofensiva del United quedó a espensas de una genialidad o un balón parado, y así llegó el empate.

Presión en campo contrario con cinco hombres.
Interesante fue la presión que realizó el ManUtd. El plan de Van Gaal era mandar, jugaba en casa y quería empezar la temporada mandando en el partido. Controlar la pelota y robarla rápido. Para ello planteó una presión a todo el campo en la que Mata formaba con los delanteros una linea de tres que presionaba a los centrales y al lateral derecho. Ander y Flecher presionaban uno a uno a los centrocampistas del Swansea, siguiéndolos, principalmente Ander que hizo un despliegue tremendo, hasta zonas de iniciación. La sorpresa fue la forma de tapar la salida por banda izquierda del Swansea. Ahí, el carrilero esperaba a medio camino entre el lateral y el extremo para presionar en campo contrario al lateral mientras Jones caía a banda para hacerle la cobertura con el extremo. Una presión muy agresiva que dejaba el centro del campo desnudo totalmente ante cualquier fallo en la presión o ante cualquier acción técnica de los centrocampistas rivales que superase la presión individual a la que estaban sometidos. Con todo, la presión le salió bien la mayor parte del partido (excepto el primer gol y alguna contra tras pérdida) y desactivó la circulación del Swansea obligando a buscar, de forma recurrente, en largo a sus extremos o a un Wilfried Bony bastante presionado en todo momento.

En el segundo tiempo Van Gaal cambió a un 4-2-3-1 con Jones y Young de laterales. Young en esa posición le costó el partido perdiendo la marca tras centro lateral. Un fallo de marcaje de alguien que nunca ha defendido, entendible. A pesar del cambio de sistema el ManUtd no consiguió una mejora significativa en su juego. El primer experimento salió mal. Sin excusas ni matices. Con muchas bajas, eso sí. Si el técnico holandés quiere mantener el esquema necesita crear un sistema que le permita salir desde atrás con fluidez o asentarse en campo contrario a través del juego en largo. Seguramente lleguen fichajes para paliar el deficit técnico y el equipo también mejorará con los jugadores hoy ausentes. Las dudas a cerca del sistema eran razonables y hoy el United ha alimentado la llama de la duda con su inoperancia. Van Gaal tiene mucho trabajo por delante.


miércoles, 13 de agosto de 2014

Una noche blanca


Dos equipos españoles se enfrentaban en una nueva final europea dejando claro el gran momento que, a pesar de su dudosa estructura económica, está viviendo el fútbol nacional. Se enfrentaban Real Madrid y Sevilla, en el primer test serio, con un título de por medio, de la temporada 2014/2015, y el partido tuvo poca historia. La superioridad del equipo de la capital fue notoria y continuada durante todo el encuentro. A pesar de esta superioridad cabe destacar ciertos detalles que podían ser previstos a priori pero que este partido ha acabado de confirmar. 

Por el lado sevillista, ha habido varios cambios de peso en el equipo y es normal y esperable que el grupo lo note. Lo note mucho. En primer lugar porque los recambios que se han conseguido no tienen el peso natural, a día de hoy, de los jugadores que han dejado el equipo. Y en segundo lugar porque solo la competición ofrecerá la oportunidad a Unai Emery de volver a forjar un equipo robusto, seguro y efectivo como hizo, tras muchas dificultades, la temporada pasada. A pesar de las ausencias, sobre todo de Rakitic que era la pieza sobre la que pivotaba el sentido del juego la temporada pasada, se han podido vislumbrar varios de los signos de identidad que hicieron del Sevilla un equipo difícil de superar. Unai no quiso hacer probaturas y mantuvo el doble pivote bajo que tanto empaque dio al equipo la temporada pasada. Las jugadas a balón parado también fueron un fiel reflejo del Sevilla de la anterior campaña, apenas conceder peligro en área propia y crear sensación de peligro con (casi) cada balón puesto sobre el área del Madrid. Y el contraataque, siempre el contraataque. El Sevilla de Emery se ha convertido en eso. Hoy, a falta de Rakitic, destacó Vitolo, es una gozada ver salir al espacio o conduciendo al joven gran canario. Y quizás podía haber sido la noche en la que el joven media punta diese un paso adelante, pero no lo fue, estuvo bastante solo. Hoy faltó Bacca, errático y lento durante todo el partido. Con todo, el Sevilla tiene motivos para esperanzarse porque la identidad no se ha alterado, aunque hoy han sido netamente inferiores. Hoy no ha estado su ariete colombiano, pero llegará. Denis a mostrado desparpajo y calidad y su aportación solo puede incrementarse. Y Vitolo ha dado muestras de haber tomado galones en la contra hispalense. Solo falta sumar el trabajo minucioso de Emery. Tiempo.


En frente estaba el Real Madrid y todas las lupas puestas en el omnipresente Cristiano Ronaldo, en la estrella local (y de la pretemporada) Gareth Bale y, por supuesto, en los grandes fichajes (Kroos y James). En los dos primeros no merece la pena detenerse, su nivel es extraordinario casi siempre y cuando no lo es, también marcan diferencias a costa de su descomunal nivel. El mediocentro alemán si merece un capítulo aparte, lo que ha hecho en su debut con el conjunto blanco es para guardar en lugar predilecto. El partido fue casi perfecto, en cinco minutos se había hecho dueño y señor del centro del campo del conjunto blanco con una naturalidad pasmosa, como si fuese un rol desempeñado durante largos años. Con el balón estuvo sublime, dio 77 pases con un 95% de eficacia. Todos ellos mejorando cada posesión, al lugar exacto en el momento preciso, con la velocidad necesaria. Un lujo para la vista, y para sus compañeros que encontraron en él un apoyo seguro durante los noventa minutos. Sin balón, bien colocado y eficiente en la presión junto a Modric. James, por contra, estuvo fuera de ritmo y lugar todo el partido. No supo leer su posición ni los movimientos del equipo y técnicamente no estuvo acertado en la mayoría de sus participaciones. Lo del colombiano es lo normal, lo esperable en casi la totalidad de los casos, cuando llegas a un Real Madrid y debutas con un título en juego. Su problema fue Kroos que dejó a todos boquiabiertos e hizo que se notase más la nota disonante que suponía el '10' en el juego coral del conjunto blanco.

domingo, 10 de agosto de 2014

Todo sigue igual

Rodaba el balón en Wembley y estaba en juego el primer título de la temporada en Inglaterra. Se preveía un partido disputado entre dos grandes equipos de la talla de Manchester City y Arsenal. El partido no fue tal y las bajas del conjunto citizen impidieron ver una lucha de poder a poder entre ambos, tendremos que esperar. Por otro lado, este partido sí demostró que muchas cosas no han cambiado tras un verano de mundial y algunos fichajes importantes. Todo sigue igual.

Se volvió a ver un Arsenal muy asociativo, con posesiones muy elaboradas en campo rival, sin prisa por buscar la portería de Willy Caballero. La esencia del equipo de Wenger plasmada sobre el terreno de juego. La gran calidad de los jugadores ofensivos del Arsenal unido a la defensa de circunstancias que tuvo que alinear Manuel Pellegrini con Clichy de lateral derecho y la pareja de centrales Boyata-Nastasic, marcó las diferencias. Se sucedían las jugadas en las que los zagueros blues eran incapaces de leer bien el ataque rival, se desajustaban y el equipo gunner, siempre por medio del juego combinativo, conseguía acercarse a la meta del City con peligro. Con todo, no deben saltar las alarmas del equipo citizen, la defensa que hoy tuvo que alinear el entrenador chileno debido a las bajas no se parece en nada a la de las noches de gala, contaba con un único jugador de la teórica defensa titular.

Aunque el resultado final fuese de 3-0, el Arsenal no debe de caer en la euforia porque sigue mostrando ciertas carencias defensivas que se mantienen de la anterior campaña. Sobre todo, sigue siendo preocupante la facilidad con la que el equipo rival le crea peligro a través del contragolpe. Cuando el equipo gunner no es capaz de terminar la jugada y comete una pérdida, es demasiado frecuente que esto acabe en una ocasión de peligro del rival. Su transición defensiva continúa con las mismas carencias, principalmente por la falta de un jugador más posicional, físico y notable tácticamente en el centro del campo. Por ello, no sería descartable que Wenger intentase fichar a un jugador de ese perfil, ya que Flamini no está para jugar 50 partidos por temporada.

Por su parte, el Manchester City mantiene la misma dependencia en dos jugadores que el año pasado: Yaya Touré y Silva. Al primero se le pudo ver hoy sin la forma óptima, aspecto que no es preocupante teniendo en cuenta el momento de la temporada y que tuvo menos días de preparación a causa del mundial. El segundo entró tarde en el partido, jugó de reserva en la segunda mitad con 2-0 en contra y apenas tuvo influencia en el choque. Parece que seguirán siendo los jugadores que marquen el camino de los de Pellegrini, camino que no ha empezado bien este año para un equipo que aspira a competir por todo. Todavía es demasiado pronto para poner la voz de alarma y sacar conclusiones precipitadas, pero el primer titulo ya se ha escapado

sábado, 9 de agosto de 2014

El tren de Isco

El jugador malagueño ha sido el jugador mas utilizado por Carlo Ancelloti durante la temporada 13/14 y, sin embargo, no da la sensación de que haya sido un jugador con un peso decisivo en el equipo. Nadie lo pondría en el once tipo, ni pensaría en él como un jugador determinante. El genio malagueño ya ha demostrado poder ser un jugador decisivo al máximo nivel, como acredita su Champions con el Málaga donde fue el referente ofensivo de un equipo que, contra todo pronóstico, estuvo a punto de meterse en semifinales. En Málaga era el líder, un jugador superdotado técnicamente que siempre la quiere, capaz de desbordar en el uno para uno o en asociación, genio en los espacios cortos, y con facilidad para encontrar el gol.

Su llegada a Madrid fue muy ilusionante para la afición, por fin el Madrid se hacía con el (posiblemente) mayor talento joven de Europa, y además español. Sin embargo, a pesar de llegar contrastado y de atesorar una calidad única, Isco fue incapaz de ganarse un puesto en el once madridista. Tarea obviamente complicada, por otra parte.

La temporada 14/15 empieza tanto más difícil para el jugador malagueño. El sistema de Carlo 4-3-3 no acaba de encontrarle acomodo, además han llegado dos jugadores importante, que serán competencia directa (Kross y James), y no ha salido nadie (de momento). El técnico italiano sabe que tiene un diamante, un jugador llamado a marcar diferencias en el corto/medio plazo, y quiere aprovecharlo. Ya ha declarado que no llegará ningún 9 en el mercado, que cuenta con Isco para esa posición si es necesario. No quiere mas competencia para el joven media punta, confía en él como recambio de los tres de arriba o de algún interior, quiere poder darle muchos minutos hasta que el chico encuentre su momento para dar un paso al frente y afianzarse en el equipo. 

De nuevo, una temporada más, partirá desde el banquillo, como suplente de lujo de una plantilla de ensueño, con la total confianza de su entrenador. El talento y la calidad ya las tenía cuando llegó, el sacrificio defensivo lo ganó el año pasado. Quien sabe si no será ésta la temporada en la que de el paso definitivo, coja su tren y se afiance como pieza clave para sorpresa de todos. Tarde o temprano ese tren llegará, Isco está destinado a triunfar.